Este otoño estrena Techo y comida de Juan Miguel del Castillo, una película que descansa íntegramente sobre sus hombros y que puede colocarla otra vez en las quinielas del premio.
El último domingo de agosto pudimos disfrutar en el Magazine del diario La Vanguardia del reportaje Novísimas conquistadoras, dedicado a la generación que a consideración del autor del texto Pedro Vallín, periodista y presidente de la AICE, serán las actrices que marcarán los próximos años el cine español.
Las escogidas y bellamente fotografiadas por Omar Ayyashi, son Charlotte Vega, Ingrid García Jonsson, Ana Fernández, Irene Escolar y “la tímida intrépida que quería estudiar filosofía” Natalia de Molina.
Quería ser actriz, pero estaba convencida de que su carácter retraído, en contraste con el de su hermana, era un obstáculo. No se lo decía a nadie, y repetía que quería estudiar filosofía. “Hasta que aprobé selectividad y pensé que no podía seguir engañando a todos. Así que dije a mis padres y mi hermana que iba a hacer las pruebas de la Escuela de Arte Dramático y que si no me cogían, estudiaría filosofía”.
Goya Actriz Revelación 2014 por “Vivir es fácil con los ojos cerrados” de David Trueba. En 2015 recibe el European Shooting Star de la Berlinale que reconoce a los jóvenes talentos emergentes del cine europeo. Con Techo y comida de Juan Miguel del Castillo encarna a una madre que lucha por mantener la dignidad y que, como subraya la crónica, puede colocarla otra vez en las quinielas de premio. Hasta el momento le ha merecido la Biznaga de Plata a Mejor Actriz 2015 en el 18 Festival de Málaga del Cine Español. Techo y comida se estrena en cines el 11 de diciembre de 2015.